lunes, 24 de enero de 2011
No es que me haya rendido, es que me he dado la vuelta, y me voy.
Llevo contracorriente exactamente cuatro meses y veintitrés días. Añádele unas cincuenta mentiras y el cuadrado de la diferencia de las veces que te hice mirarte al espejo conmigo. Sustituye x por la superficie de la manta en la que me envolvía para salir al balcón desnuda mientras cortaban la hierba y pártelo todo entre todos los puntos por los que te gané en aquel juego que inventamos. Iguálalo al sol que ha salido hoy elevado al número de calvos y no calvos que vimos correr por el parque y dime si no es verdad que ha llegado el momento de dejarse llevar y olvidarlo todo.
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Sencillamente increíble.
ResponderEliminarEs perfecta.